Política y sociedad

 

América en blanco y negro
Eric Fassin .- Desde la generación que luchó por los derechos cívicos, conjunción de la esperanza de Martin Luther King y la cólera de Malcolm X, la "comunidad" negra norteamericana parece haberse dividido en una doble realidad: por una parte, surgió una nueva burguesía negra que se benefició de las políticas raciales del stablishment posteriores a los años sesenta (al lado de los yuppies, se hablaba en los años ochenta de los buppies: black urban professionals, no menos deslumbrados por el éxito material que sus colegas blancos); por la otra, se aceleró el hundimiento del subproletariado negro (cifrado en denominaciones como underclass o inner cities), que se debate entre la criminalidad y la prisión, el sida y la droga, la desintegración familiar y la desmoralización. Cornel West vislumbra una relación: sin que lo uno explique a lo otro, el cinismo de los primeros alimenta la desesperación de los segundos. En este sentido, West responsabiliza a las élites por no asumir su papel natural de leadership.

Crítica a la política del vacío
Ferenc Fehér .- El ámbito de la política moderna ha sido constituido por una serie de invenciones. La primera de ellas fue la invención de la "sociedad". Las denominaciones mas tempranas del conjunto de los asuntos y los ámbitos humanos ("mundo", ciudad-Estado, el reino del hombre frente a la ciudad de Dios) eran muy diferentes entre sí por sus disímbolos significados, pero tenían algo en común: lo que nosotros, modernos, llamamos "sociedad" (frente al "Estado") permanecía indistinguible en ellas. Autoridad y norma pueden tener más o menos cabida dentro del aristotelismo, pero éste no conoció (ni procuró) distinción alguna entre "Estado" y "Sociedad". (Llamar a las diversas etapas del mundo premoderno "sociedades" y estudiarlas por sí mismas, con independencia de sus "Estados", es uno de esos abusos -carentes de sentido crítico- de las estrategias que la modernidad aplica a lo premoderno y que es preciso revisar).

Los bordes críticos del sistema

Antonio García de León
.-En este encadenamiento, la rebelión de Chiapas surge en 1994 como la expresión última de una serie de conflictos que se maduraron localmente, en uno de los bordes más críticos del sistema, por lo menos durante veinte años. En ella desembocaron varios procesos de resistencia local al autoritarismo, al caciquismo y a la sangrienta represión ejercida por el Estado contra el movimiento indígena y campesino de la región. La sublevación aparece así como el último recurso –el de las armas–, ante la imposibilidad de abrir otras vías a la participación política: de allí que el conflicto generado sea más de naturaleza política y social, incluso ciudadana, que estrictamente militar.

Más alla de la militancia contra las creencias; secularización, laicidad y psicoanálisis
Fernando M. González.- Ciencias Sociales y religión; Entre los supuestos fundamentales que conforman el nacimiento de las llamadas ciencias sociales encontramos dos. El primero de ellos se refiere a la renuncia de las concepciones metasociales para explicar a la sociedad,1 lo cual va a implicar el “axioma” que “los hechos sociales no pueden ser explicados sino por otros hechos sociales”.2 El segundo Durkheim lo formuló de la siguiente manera: “la vida social debe explicarse no por la concepción que se hacen aquellos que en ella participan, sino por las causas profundas que escapan a la conciencia”. Marx, sin duda, lo acompaña en este punto. Ello implicó arrancar al objeto de las evidencias del sentido común.

El nacionalismo; una microhistoria
Peter Guardino.- En diciembre de 1838, en Tecpan, un pueblo costero aislado en el estado de Guerrero, varios residentes asesinaron a dos extranjeros, uno alemán y otro inglés. Este incidente estuvo inspirado, irónicamente, por un breve conflicto protagonizado por los gobiernos de México y Francia. Inmortalizado como "La guerra de los pasteles", ya que entre los asuntos en disputa estaba la compensación económica a ciudadanos franceses, que incluía a un panadero cuya propiedad fue destruida por la violencia de la política mexicana.

Veinte de diciembre

Héctor Guillén.,- ..de 1994. Para México, la fecha más cercana a la catástrofe de 1929. Un sexenio de espejismos congregados en torno a la obsesión de integrar al país a las naciones más desarrolladas concluyó en el hundimiento de la economía nacional. La experiencia neoliberal mexicana, alabada y alentada por los organismos financieros internacionales, se transformó de la noche a la mañana en la versión de la debacle a la vuelta de la esquina. Un libro de texto reciente sobre políticas públicas, M. Schüler y K. Lorenz: Staatsverwaltung und soziale Marktwirtschaft, publicado en diciembre de 1996, le dedica un capítulo con el siguiente encabezado: "El efecto tequila o cómo cometer todos los errores a la vez".

Veinte de diciembre/ II
Héctor Guillén.-Durante varias décadas el sistema financiero mexicano se caracterizó, según los términos de Mc Kinnon y Shaw, por un alto grado de constricción financiera. La Secretaría de Hacienda y Crédito Público y el Banco de México regulaban el desempeño de las instituciones privadas de crédito a través de tres mecanismos: 1) Las reservas obligatorias se traducían en crédito sin costo o a bajas tasas de interés en favor del sector público; 2) un sistema de "encuadre selectivo" determinaba el control del crédito que obligaba a los intermediarios financieros a destinar una parte de sus carteras de préstamo a la agricultura y a las empresas pequeñas y medianas, y 3) las autoridades fijaban las tasas de interés pasivas y activas que se mantuvieron en un nivel estable durante periodos prolongados. En estos años, el mercado de valores desempeñó un papel limitado y, en la práctica, no existían las operaciones de open market. La política monetaria se guiaba por el financiamiento que el Banco de México otorgaba al sector público y a la tarea de ajustar las reservas obligatorias.

Una aristrocracia casi democrática
Hans Ulrich Gumbrecht .-Habían regresado hacía unos cuantos días a la pequeña ciudad universitaria de clima amable y pensionados ricos, en donde vivían hace ya trece años, cuando él encontró en su buzón una carta sin timbres dirigida a ella, que les hizo notar que tan lejos estaban de casa sin siquiera haberse movido de ahí. Abigail K., la joven esposa del Presidente de la Universidad que, así se decía, le gustaba hacerse llamar "First Lady", y de la cual se temía que escuchaba estas palabras sin ironía alguna, invitaba a las esposas de los profesores a un almuerzo en Calistoga. Ahí se proponían visitar, primero, una "vieja pastelería de casi cien años" (lo que en California suena tan pomposo como en Europa, por ejemplo, una "fuente romana") bajo la guía del Profesor W. y, después, un orfanato para entonar canciones populares con los niños, no sin antes detenerse, entre la pastelería y el orfanato, en la fresca sombra de un parque de árboles antiguos para allegarse de champagne, canapés y pastel de trufa (de la mencionada pastelería).

La esperanza de lo incierto
Luis Hernández .- La insurrección zapatista surge cuando el marxismo, la emancipación, la libertad y la humanidad no son ya un solo proyecto. Si la caída del Muro de Berlín significó el fin del sueño soviético, la crisis del Estado de bienestar, el fin del pleno empleo y la destrucción de las redes de seguridad social expresan el agotamiento de los paradigmas socialdemócratas. Si en algún momento de las luchas emancipadoras, nacionalismo e internacionalismo llegaron a ser expresiones de un mismo proyecto, la Realpolitik del antiguo bloque socialista y su instrumentalización de la solidaridad internacional para fines particulares, hizo que uno y otro marcharan irremediablemente separados.

El PRD: la errancia continua
Norbert Lechner, Mauricio Merino, Lorenzo Meyer, Enrique Semo, Demetrio Sodi.- Hasta hace poco la política estaba relativamente acotada por el sistema político. Las instituciones políticas marcaban el campo de la política y eso permitía distinguir entre la esfera política y la no política. En la actualidad la política desborda el marco institucional del sistema político; y lo desborda desde "abajo" y desde "arriba". Desde "abajo": las iniciativas ciudadanas, la sociedad civil actual por ejemplo, o el conjunto de presencias ciudadanas que constituyen —digamos— una "zona gris" que no es directamente política (en términos de los partidos o de las instituciones políticas), pero que tampoco podría llamarse apolítica o social. Desde "arriba": otra "zona gris" en la que está prosperando una informalización de la política desde "arriba" se debe a —si se me permite llamarles así— las nuevas redes políticas (en inglés: networks).