CARLOS VITALE  

POEMAS

 

 

 JORNADA

Tú, de pie, desnuda en la penumbra.

Tu espalda es el arco del conocimiento.

Desde la cama, observo y espero.

Cuando te vuelvas me dirás quién soy.

Sin otra luz que mi deseo.

LIMOGES

Las ramas

arañan

el río

con dedos

atónitos.

 

EL ESTADO DE LA CUESTIÓN

Has parado la noche, pero me has negado el día.

NEUCHÂTEL

No te fíes

de la alianza del lago.

 

RISAS DE COCODRILO

No te engañes.

El de la foto

tan sonriente

ya era infeliz

(tú lo sabes,

bien que lo sabes).

Contémplalo ahí detrás,

público o comparsa,

borroso

incluso en primer plano.

Sonríe

aunque esté muerto.

Si le pides

que se adelante

no da sombra.

Convéncete:

sólo la sombra

no da sombra.

 

VISTA AÉREA

Roma entre las nubes.

Roma en las nubes.

 

OTRA VUELTA DE TUERCA

Y nada más que sed

y vasos rotos.

 

SPIGNO

Las estrellas

velan

el sueño

de la encina

de Spigno.

Tranquila,

duerme.

Al despertar,

dará forma

de sombra

a las palabras.

 

PEPE BARROETA DICE QUE NO DICE

El don

de la palabra

no es

un don,

es apenas

arder

en el propio

fuego,

abrasarse

hasta que la mano

dibuje

el vasto

signo

de la desolación.

 

ÍTACA

Y si he llegado,

¿qué haré de mí?



Carlos Vitale, “Poemas”, Fractal nº 49, abril-junio, 2008, año XIII, volumen XIII, pp. 127-136.